Los árboles dan frutos extraños, hay huellas de animales enormes en el lugar, el agua que bebemos es de colores y la naturaleza parece haberse vuelto loca. “¿Qué está pasando en las tierras del Pueblo de los Hombres?” Era la pregunta de la Manada Seeonee cuando llegamos a visitar a Mowgli. Pero él no estaba allí; alarmado por lo que había visto se fue a investigar lo ocurrido, al igual que fuimos haciendo nosotros.
Al principio pensábamos que la culpa era de un embrujo ancestral en la zona, una extraña criatura conocida como el Norn y sus malos espíritus, contra los que hicimos distintos encantamientos que no funcionaron. Decidimos seguir investigando y después de construir nuestro poblado salimos por los montes a observar lo que ocurría en otros lugares. Nuestra sorpresa fue descubrir que la mano humana era la que estaba dirigiendo todo esto. Así, con los ojos y oídos bien abiertos, descubrimos que una organización llamada DPC quería construir donde estábamos un complejo energético que provocaría grandes desastres en la naturaleza, y por eso intentaban echarnos del lugar asustándonos.
“¡No podemos permitirlo!” decidió la manada, y nos pusimos en contacto con distintos representantes de organizaciones, liberamos a un abogado y llevamos a juicio a la organización… pero perdimos. Tras una gran batalla convencimos a algunos de los miembros de la DPC de hablar con el magnate, y hacer que cambiara de idea, y que en vez de ese complejo optara por trabajar con energías limpias, renovables, que cuidase de la naturaleza. Así conseguimos arreglar lo que ocurría, y Mowgli nos despidió para quedarse por allí más tiempo, obsequiándonos y protegiéndonos con su amuleto.
Todo esto nos ha llevado quince días de juegos, aventuras, baños en el río, batallas en la lona, búsquedas de piedras, carreras de patitos, misiones imposibles, marchas por la sierra de la demanda, canciones, sol, lluvia y muchas otras cosas que los lobatos hemos vivido en Barbadillo de Herreros, la tierra del Poblado de los Hombres, de la que nos llevamos un maravilloso recuerdo y anécdotas innumerables.
Ahora que hemos vuelto, nos hemos duchado y comido la comida rica de mamá y papá os ponemos al día de nuestras aventuras y os deseamos
Buena caza y largas lunas
MANADA SEEONEE